El proyecto de premios siempre ha estado presente en la Academia, según los estatutos de la institución " se convocará cada dos años a certámenes públicos y ofrecerá premios para el fomento de las letras" y "para recompensar en todo tiempo los importantes servicios y descubrimientos literarios". En este sentido se concedían desde el año 1778 de forma ocasional en un intento de "promover y adelantar la verdadera elocuencia".
El reverso del premio estampado sobre papel muestra: leyenda: En una filacteria, LIMPIA, FIJA Y DA ESPLENDOR. En el exergo, CERTAMEN / EXTRAORDINARIO. Tipo: En una hoguera, crisol al fuego con volutas de humo. En la parte inferior izquierda, marca de grabador, A. GISBERT. Todo dentro de doble gráfila de línea continua.