Quien abrojos siembra, espinas coje
Las acciones son más sinceras que las palabras
En una sangrienta acción, sin que el número entre cierto, la perdería el que más presto, perdiese la formación
De las malas acciones nace el aborrecimiento
Abuelo comerciante, hijo caballero y nieto pordiosero
Llorarte he abuelo, ahora que no puedo
La abundancia engendra hastío
Tanto me acechas, que al fin te pesa
Quien mucho abarca poco aprieta
Quien no basuree que avenee