Carta de Paul Aebischer a Dámaso Alonso con la que agradece el nombramiento de miembro correspondiente de la Academia
Carta de Pedro Calmon, presidente del Instituto Histórico e Geográphico Brasileiro, al presidente de la Real Academia Española en la que le dice que considera justo y noble el homenaje a Julio Guillén en el Boletín de la Academia
Carta de Pepe a Melchor Fernández Almagro en la que le dice que le parece respetable el criterio de un sector de eliminar creativos en favor de técnicos y acepta su consejo de esperar
Carta de Porfirio Díaz Machicao a Alonso Zamora Vicente en la que le pide que recomiende la concesión de una beca española para parte dramático y declamación para Marlene Fernández del Granado
Carta de Porfirio Díaz Machicao, director de la Academia Boliviana de la Lengua, a Amado [sic Dámaso] Alonso en la que le envía las condolencias de esa Academia por el fallecimiento de Ramón Menéndez Pidal, le informa del homenaje que le dedicarán en la Universidad Mayor de San Andrés en diciembre, y le felicita por su designación de director de la institución española
Carta de Rafael Ferreras a Rafael Lapesa en la que le agradece que firmara su candidatura como académico correspondiente
Carta de Ramón Menéndez Pidal a Julio Casares en la que le indica que le parecen bien los nombres de Pemán y Fernández Almagro para la sesión de duelo por la muerte de Pérez de Ayala, alude a la candidatura de Rodríguez-Moñino y a los términos groseros de la última carta que éste le ha dirigido
Carta de Roberto Soto Santana, secretario del Club Villarino, a Dámaso Alonso, director de la Real Academia Española, en la que le envía, por acuerdo de la Junta directiva del Club, la condolencia por el fallecimiento de Ramón Menéndez Pidal y, a la vez, le considera el continuador indicado en la tarea de orientar a la Real Academia
Carta de Rodolfo M. Ragucci al director, Dámaso Alonso, en la que le agradece la adhesión de la Academia a la celebración de sus bodas de diamante sacerdotales
Carta de Salvador de Madariaga a Dámaso Alonso, director de la Real Academia Española, en la que expresa cuánto admiraba la originalidad científica de Julio Palacios y el valor inestimable como académico que sentía por él
