Carta de Ramón Menéndez Pidal en la que agradece las felicitaciones que los académicos le han enviado con motivo de sus 99 años y expresa la satisfacción que le produjo recibir a la representación de académicos en su domicilio
Carta de René Bouvier a Ramón Menéndez Pidal en la que le dice que ha tenido conocimiento de su nombramiento como correspondiente extranjero por el señor Cárdenas, que asistió a una sesión del Comité France-Espagne, y expresa su satisfacción y su agradecimiento
Carta de Resurrección María de Azkue a Ramón Menéndez Pidal en la que le informa del estado en que tiene un ensayo sobre el romance aragonés en relación con el vascuence, y de que tiene unos datos para un trabajo de [Julio de] Urquijo; y, le ruega, que le gestione un carnet para viajar a Madrid
Carta de Resurrección María de Azkue a Ramón Menéndez Pidal sobre la elección de quién leerá el discurso de contestación
Carta de Ricardo Palma a Mariano Catalina en la que le pone al día de su destitución como director de la Biblioteca Nacional
Carta de Ricardo Samper, ministro de Industria y Comercio, a Ramón Menéndez Pidal en la que alega el motivo para no poder asistir al acto de ingreso de Gregorio Marañón en la Academia Española
Carta de Roberto Soto Santana, secretario del Club Villarino, a Dámaso Alonso, director de la Real Academia Española, en la que le envía, por acuerdo de la Junta directiva del Club, la condolencia por el fallecimiento de Ramón Menéndez Pidal y, a la vez, le considera el continuador indicado en la tarea de orientar a la Real Academia
Carta de Rodolfo Barón Castro, secretario de la Oficina de Educación Iberoamericana, a Rafael Lapesa, secretario, con la que expresa a la Corporación el sentimiento por la desaparición de Ramón Menéndez Pidal y lamenta no poder celebrar el centenario de su nacimiento
Carta de Rodolfo E. Hirsch al secretario de la Academia en la que le expresa su consternación y la de los compañeros del antiguo Catálogo general de incunables por el fallecimiento de Ramón Menéndez Pidal
Carta de Rodolfo J. Slabý al director con la que remite las primeras 80 páginas de su Diccionario alemán-español y expresa su intención de dedicarlo a la Academia
