Le comunica que fue él, Casto Rojas, quien pronunció la oración fúnebre, la cual adjunta a la carta.

Le comunica que la Academia Boliviana le rindió un homenaje con una ofrenda floral y un discurso pronunciado por Casto Rojas.

Añade que, cuando Juan Quirós se incorpore a la Academia Boliviana, le informará y le enviará una copia del discurso de ingreso.

Le informa de la recepción de Javier del Granado como académico de número de la Academia Boliviana y le solicita el acuse de recibo del discurso de orden de Rafael Ballivián. También le anuncia el envío de la tercera edición de Era una vez...: historia novelada de la Villa Imperial de Potosí.

Le informa de que Eduardo Díez de Medina, director de la Academia Boliviana, hizo uso de la palabra en nombre de dicha corporación durante las honras fúnebres para resaltar los méritos y el trabajo del difunto.