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Descripción archivística
Curiel, Juan (1690-1775) Sevilla (España) Primer tomo del Diccionario de autoridades (1726)
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Acta de 23 de noviembre de 1730

Por ausencia del director, Juan de Ferreras preside la junta.

Se da cuenta de un memorial de Blas Antonio Nasarre y Férriz en el que se expresa su deseo de ingresar en la Academia. Se procede a votar secretamente y queda admitido como académico supernumerario, con opción a plaza de número, en la plaza de Juan Curiel, que se encuentra ausente sirviendo en la Real Audiencia de Sevilla. Se acuerda que el secretario le avise para que pueda ir a tomar posesión.

José Casani propone que para que los estatutos de la Academia se tengan más presentes sería conveniente que se leyesen en la junta de tiempo en tiempo, a pesar de estar impresos e incluidos en la historia de la Academia que se puso al principio del primer tomo del diccionario [de autoridades]. Se resuelve tras votación que se lean en junta dos veces al año, una en el mes de enero y otra en el mes de julio.

Se discute si la voz "destilar" debe explicarse en la combinación De o en la combinación Di y se acuerda que se explique en la combinación De. Se acuerda hacer lo mismo con la voz "difinir", que remite a "definir".

Prosigue la lectura de lo trabajado por Miguel Gutiérrez de Valdivia sobre la combinación De.

Acta de 27 de mayo de 1732

Por ausencia del director, Juan de Ferreras preside la junta.

El secretario indica que ha recibido un papel del secretario del marqués de Villena, Francisco Javier de Armendáriz, en el que le avisa de que el director ha salido el viernes hacia Cadalso, por lo que podían proseguir las juntas. También indica que Jacinto Mendoza ha tenido que viajar a Huete para votar en el capítulo general de su religión.

El secretario da cuenta de que el sábado se terminó la impresión del tercer tomo del diccionario y que ha hecho encuadernar dos ejemplares sin recortar los cantos, uno para servir en la sala de juntas y otro para guardar en la secretaría.

Se discurre sobre las gratificaciones que se pueden dar a los oficiales de la imprenta y se resuelve que se envíe a la viuda de Francisco del Hierro una arroba de chocolate y se repartan 300 reales a los oficiales. También se acuerda dar un ejemplar del libro y un doblón de a ocho en efectivo a cada amanuense de Vincencio Squarzafigo.

Se acuerda distribuir los ejemplares del tercer tomo del diccionario como se distribuyeron los de los dos tomos anteriores. Para recabar la aprobación del director, se acuerda que el secretario escriba al director para darle cuenta de este asunto.

Se acuerda que se remitan ejemplares a Juan Curiel en Sevilla para que pida audiencia a los reyes para presentárselos y avise a los académicos que están allí para que asistan todos juntos. La secretaría enviará cartas avisando a los académicos que se encuentran en esta ciudad. Se acuerda también la remisión de ejemplares del tercer tomo del diccionario a la familia real de Portugal para que se los entreguen a la princesa de Asturias.

Los libros para el infante don Carlos, duque de Parma, se remitirán a José de Montealegre, al que se enviarán también tres juegos de los tres tomos publicados para presentárselos al infante, a la duquesa de Parma, al duque de Florencia y a la princesa electriz del Palatinado.

En cuanto a los libros para las reinas viudas [Luisa Isabel de Orleans Borbón y Mariana de Neoburgo], se acuerda que Vincencio Squarzafigo y otro académico pasen a entregarlos a las personas encargadas de sus dependencias en Madrid para que se los envíen a Francia.

A los académicos se entregará un ejemplar encuadernado en pasta a cada uno y ocho en pergamino además de cincuenta ejemplares más para el director.

Una vez que la impresión esté seca, se encuadernarán en tafilete los ejemplares destinados a la familia real, el resto se encuadernará en pasta y en pergamino como en las veces anteriores.

José Torrero entregó la parte de la letra L con las autoridades arregladas, desde la combinación Li, en adelante.

Prosigue la explicación de las voces de la combinación Ha, que está a cargo de Manuel de Villegas.

Acta de 30 de septiembre de 1732

Vincencio Squarzafigo comunica que Juan Curiel ha enviado una carta en la que notifica que cuando llegaron los ejemplares del tercer tomo del diccionario el rey se encontraba indispuesto, por lo que tuvo que esperar para solicitar la audiencia hasta el día 11, cuando lo hizo por medio del marqués de la Paz. Al día siguiente el marqués de la Paz le transmitió de orden del rey que deseaba ver el tercer tomo del diccionario, por lo que Juan Curiel lo puso en sus manos por medio del marqués de la Paz.

Juan Curiel pidió audiencia con la reina por medio de la marquesa de Torrecusa, quien de orden de la reina dijo que podría pasarse cuando quisiera. Diego Suárez de Figueroa, Miguel Gutiérrez de Valdivia, Casimiro Ustáriz y Juan Curiel entregaron el libro a la reina el 14 de septiembre. Ese mismo día pasaron a los cuartos de los príncipes e infantes por orden de la reina y entregaron los libros correspondientes.

Los nueve tomos encuadernados en tafilete para la casa real portuguesa se pusieron en manos de la duquesa de Montellano.

Los diecinueve encuadernados en pasta con las cartas que se le enviaron quedaron entregados a las personas de la lista que Vincencio Squarzafigo remitió.

Juan Curiel da las gracias por el tomo que queda en su poder y remite copia de las oraciones que hizo a la familia real. Se acuerda que se le responda dándole las gracias. Además solicita que se le envíen algunos ejemplares para entregar a otras personalidades y la junta acuerda que se le envíen los ocho tomos que se dan a cada uno de los académicos que han trabajado la obra y asisten a la Academia.

Blas Antonio Nasarre envía a la junta el ejemplar de la Gaceta de Madrid en la que aparece el capítulo de la función ejecutada en Sevilla y la indicación del lugar de venta del tercer tomo del diccionario.

Se ven cinco cartas que ha recibido Vincencio Squarzafigo desde Sevilla y doce papeles escritos desde Madrid de agradecimiento por los ejemplares enviados.

Gracián de Peralta solicita el envío del segundo tomo del diccionario de autoridades; la junta lo aprueba.

Prosigue la explicación de las voces de la combinación In, que está a cargo de José Casani.

Acta de 6 de abril de 1734

Juan de Ferreras preside la junta por ausencia del director.

El secretario da cuenta de haber informado al director de que ya tiene su poder los ejemplares del cuarto tomo del Diccionario de autoridades, encuadernados en tafilete y en pasta, destinados a la familia real y otras personalidades. El director le dice que pasará a solicitar fecha y hora al rey para presentar la obra y que una vez las obtenga le dará aviso para que informe a los académicos, con el objeto de que acudan todos a la función como cuando fue presentado el primer tomo.

Se acuerda que Manuel Villegas Piñateli y el secretario entreguen los ejemplares del cuarto tomo destinados a las reinas viudas residentes en Francia a sus representantes en la corte, para su posterior remisión.

Se acuerda entregar ocho ejemplares en pergamino del cuarto tomo del Diccionario de autoridades a Juan Curiel, para que los distribuya en Sevilla del mismo modo que hizo con el tercer tomo.

Concluye la lectura de la explicación de la combinación Qui y se lee la de al combinación Quo, ambas a cargo de Francisco Antonio Zapata, con lo cual finaliza la letra Q. Quedan aprobadas y en su poder hasta que pasen a los revisores.

Acta de 12 de marzo de 1722

Juan Curiel da cuenta de haberle conferido el rey el empleo de Alcalde del Crimen de Sevilla. Se despide de la Academia, pidiendo que se le conserve su plaza de académico y ofreciendo remitir desde allí las autoridades de las Partidas del Rey don Alonso que están a su cargo.

Prosigue la explicación de las voces de la combinación Bo que estuvo a cargo de Andrés González de Barcia.

Acta de 4 de mayo de 1724

Se da cuenta de una carta de Juan Curiel en la que remite las autoridades de la letra A de Las Partidas del Rey Alfonso. Se acuerda que se le responda en nombre de la Academia dándole las gracias.

El secretario trae las autoridades evacuadas de El Conde Lucanor, del príncipe Don Juan Manuel, junto con la lista alfabética de voces. Se acuerda que se distribuyan entre los académicos a cargo de las distintas combinaciones y letras y que se guarden las restantes junto con la lista en la secretaría.

Como José de Montealegre entregó lo que tenía trabajado de la combinación Al, el 2 de mayo se reunieron Adrián Conink, Manuel de Villegas, Fernando de Bustillos, Miguel Perea y Vincencio Squarzafigo para subdividir esta combinación y hacer una propuesta de reparto entre los académicos. Se aprueba la subdivisión y todos los académicos presentes, excepto Juan de Ferreras, aceptan el encargo.

Fernando de Bustillos lee la explicación de las voces de la combinación Alo y Lorenzo Folch de Cardona la de las voces de la combinación Ci.