Se acuerda incluir en la lista de autoridades la traducción manuscrita que hizo Felipe IV de la Historia de Italia de Francisco Guicciardini. El secretario se encargará de copiarla y adecuarla al orden cronológico.
El director propone pasar a cumplimentar a la reina cuando llegue a Madrid y redactar una oración para la ocasión. Se aprueba. Se eligen los académicos que acompañarán al director: Juan de Ferreras, Gonzalo Machado y el marqués de Aguilar de Campóo; y se designa a Gonzalo Machado como redactor de la oración.
Se da cuenta a la junta de dos proposiciones de José Casani: que para evitar algunas disputas sobre etimologías y correspondencias latinas se traigan a las juntas algunos libros, especialmente diccionarios latinos griegos y hebreos, y que se anoten las enmiendas a las listas de voces en el libro de acuerdos. Se aprueba la primera propuesta y el director manda traer el Calepino aumentado y el del padre Henríquez para el latín, el del padre Alcalá para el árabe y los lexicones de Scápula y Juan Buxtorfio para el griego. Se rechaza la segunda propuesta.