Los eufemismos rojos para no confesar la rendición de Santander
- ES 28079 ARAE F4-2-1-3-1-5-2-4-5
- Unidad documental simple
- 1937-09-01
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Los eufemismos rojos para no confesar la rendición de Santander
Las informaciones rojas y la rendición de Santander
Dice que en cuanto tuvo la oportunidad de irse a América, tomó el primero de agosto un barco a Buenos Aires, donde tenía algún prestigio por los libros y conferencias que dio en distintas fechas. Pero las dificultades aumentan en vez de disminuir, y le persiguen constantemente los comunistoides, por lo que ha resuelto quedarse en concepto de centinela intelectual. Añade que recibió un proposición generosa de Manuel Aznar y que si sabe de revista o periódico que le necesite, se lo diga. Le pide noticias de los amigos.
Añade que no sabe si podrá escaparse a San Sebastián al consejo de su banco y pasar por Santander para ver a sus nietos.